Un rostro adusto y temeroso
mostraba tu sonrisa de nube
Unas palabras esquivas
sobre dos vacías tazas de chocolate
ocultaban tu ardiente pasión
Caminas de puntilla por la habitación
y mis manos te despojan de esa sábana que te envuelve
Deja que mis ojos suspiren
sobre tu cuerpo desnudo
Déjame llover sobre tu verano
Quiero ser para siempre
Quiero ser para siempre
tu última estación.
Del poemario inédito: "Tu última estación"
De: Miguel Granado-Troconis